De ideología cercana a la Izquierda, María nunca perteneció a un partido, y optó por ejercer su carrera política desde un lugar independiente. Después de la revolución de los claves que puso fin a la dictadura portuguesa en 1974, formó parte de varios gobiernos provisionales. 

Fue dos veces ministra de Asuntos Sociales, embajadora de Portugal en Unesco, consultora del ex presidente António Ramalho Eanes y diputada en el Parlamento Europeo, donde llegó como independiente a través de las listas del Partido Socialista (PS). 

Marcó un cambio en la historia de su país para siempre cuando el 1 de agosto de 1979 hasta 1980 se convirtió en la primera ministra de Portugal en un ejecutivo provisional. Unos años más tarde, fue elegida eurodiputada por el Partido Socialista. además por su trabajo en favor de los derechos de la mujer. 

Su infancia 
Desde los 7 años vivió en Lisboa, ciudad a la que se mudó junto a su familia y donde pasó toda su infancia y juventud. Allí cursó estudios básicos en una escuela particular y después hizo secundaria en el Liceo Filipa de Lencastre, donde destacó como la mejor alumna de su promoción. Además, fue dirigente de la Mocidade Portuguesa Femenina. 

En 1953 logró un título universitario que pocas mujeres portugueses habían logrado para esa época, licenciándose en Ingeniería Químico-Industria por el Instituto Superior Técnico. Luego completó su formación con una beca de investigadora en la Junta de Energía Nuclear y luego fue contratada por la química Companhia União Fabril (CUF), que aceptó por primera vez una mujer en sus cuadros técnicos superiores. Asumió la dirección de proyectos del Departamento de Estudios y Proyectos entre septiembre de 1954 y octubre de 1960.  

Profundamente católica y comprometida con la ampliación de derechos para las mujeres, María alternaba su trabajo profesional con otros labores en cargos en organizaciones sociales vinculadas a la Iglesia católica, desde donde luchaba contra la discriminación de las mujeres en todos sus ámbitos 

En la década de 1950 se afilió a la Juventud Universitaria Católica Femenina, que llegó a presidir entre 1952 y 1956. Ese mismo año fue elegida presidenta internacional del movimiento estudiantil Pax Romana. En 1957 fue fundadora de la delegación lusa del instituto secular Graal, dedicado en exclusiva a proyectos de emancipación, desarrollo e igualdad y a partir de 1960 ejerció la coordinación de proyectos formativos.  

El 9 de junio de 1994 fue condecorada con la gran cruz de la Orden del Infante Don Enrique, mientras que en 1997 recibió la Medalla Machado de Assis de la Academia Brasileña de Letras. Dos décadas después, un 10 de junio del 2004, falleció en su casa de Lisboa a causa de un paro cardíaco.