Nacida en Madrid en 1943, Pilar se destacó como activista y política en Alicante, donde fue elegida diputada por esa ciudad en las primeras elecciones democráticas.
En los años 60, Brabo estudió Físicas y Ciencias de la Educación en la Universidad de Madrid. Además de asistir a clases y ser una destacada alumna, Pilar también dedicaba muchas horas del día a la lucha antifranquista desde el sindicato de estudiante FUDE, a donde ingresó en el año 1964. Un año después se afilió al Partido Comunista de España y 4 años después fue incorporada al Comité Central de este partido.
Estuvo presa unas 14 veces por su liderazgo político en épocas de dictadura franquista. La última vez fue en 1974, con una pena de siete meses, apenas un año antes de la muerte del dictador. Sin embargo, su determinación y valentía por las causas que motivaron su lucha y que le valieron tantas veces la reclusión de su libertad no la hicieron perder la confianza en sus ideales.
Tras la caída del régimen franquista, en las elecciones de 1977 y 1979 fue elegida por Alicante. Allí comenzó por apoyar al sector más renovador del Partido Comunista del País Valenciano y apostando notablemente por el ámbito de la educación.
Para el inicio de la década del 80, los prejuicios sobre las mujeres en la escena pública seguían a la orden del día. Un claro ejemplo es el retrato que definía a Brabo en la Gaceta Ilustrada el 25 de enero de 1981:
"La ves tan frágil, tan rubita, con la cara lavada, como una colegiala de falda escocesa y chaqueta de punto, que resulta difícil imaginarla mitineando por las asambleas, por los barrios, en el podio parlamentario, en el Comité Central del Partido Comunista. Y resulta que Pilar Brabo, treinta y siete años, diputada por Alicante, es la mujer, la única mujer que está presente en todos los órganos de decisión del PCE. Y claro, la fragilidad es sólo un espejismo, una coartada machista y reaccionaria, un dato de la puesta en escena" (...)
Su último cargo político fue el de gran impulsora de la Protección Civil, creando un protocolo para la prevención de intervención en casos de catástrofes naturales o catástrofes intencionadas que todavía hoy tiene vigencia.
A los 50 años, en el 1993, fallecía por causa de un cáncer terminal. Hasta el final, su compromiso por su país continuó intacto.