Margaret Murie, figura indispensable en la aprobación de la Ley de Vida Silvestre de Estados Unidos
Naturalista, conservacionista y escritora estadounidense, fue pieza central en los esfuerzos para establecer el Refugio Nacional de Vida Silvestre del Ártico en Alaska, por lo que fue apodada como la "abuela del movimiento conservacionista ".

Murie fue una de las primeras mujeres en asumir un papel de liderazgo en el movimiento conservacionista de Estados Unidos y fue ampliamente reconocida por su trabajo. En 1980 recibió la Medalla Audubon y por su devoción a la conservación de por vida, en 1998 fue galardonada con la Medalla Presidencial de la Libertad por parte del presidente de Estados Unidos, Bill Clinton. 

Orígenes  

Nacida en Seatle, Washington, la pequeña Mardy (como fue apodada de manera cariñosa) se mudó a los 9 años a la tierra que marcaría el resto de su vida: Alaska.  
En Fairburn donde vivió su juventud, en 1924, se convirtió en la primera mujer en graduarse del Alaska Agricultural College and School of Mines (que ahora es la Universidad de Alaska), obteniendo un título en administración de empresas.  

Ese mismo año conoció al amor de su vida, Olaus Murie, quien también fue su gran compañero a la hora de investigar y trabajar en la conservación de diversas especies.  

Cuando se conocieron, Olaus todavía trabajaba para la Oficina de Estudios Biológicos de EE. UU (ahora conocido como Servicio de Pesca y Vida Silvestre de EE. UU.) Mardy se sumó a la expedición que Olaus ya tenía prevista, con un plan por delante de 885 km y ocho meses de duración para estudiar el caribú de Brooks Range.  

Juntos estudiaron durante casi 4 décadas diversidad de ovejas, alces y cientos de animales sislvestres dentro y fuera del país, siempre con el objetivo de preservar las especies y proteger las que todavía estaban vivas en tierras americanas.

Tras la muerte de su querido Olaus, Mardy decidió seguir adelante y terminar con lo que habían iniciado juntos: trabajó en La Ley de Conservación de Tierras de Interés Nacional de Alaska, que se convirtió en ley en 1980 y aseguró la protección de más de 100 millones de acres (40,468,564 hectáreas) de áreas silvestres de Alaska. Como parte de la legislación de 1980, la zona de distribución ártica reservada en 1960 se amplió y se renombró como Refugio Nacional de Vida Silvestre del Ártico. Sin embargo, debido a que Alaska alberga importantes reservas de petróleo debajo de su superficie, la extracción de petróleo, particularmente en la llanura costera del refugio, siguió siendo un tema polémico . 

Mardy siempre continuó promoviendo activamente la conservación de la naturaleza. En 1975 fue nombrada para un grupo de trabajo cuyo objetivo era identificar tierras en Alaska que necesitaban protección.  

Entre los máximos reconocimientos, Murie recibió la Medalla Audubon en 1980, el Premio John Muir en 1983 y el Premio de Conservación Robert Marshall en 1986. Por otra parte, el Servicio de Parques Nacionales la nombró guardaparque honorario y recibió un Doctorado honorario en Letras Humanitarias de la Universidad de Alaska.   

En 1998, el presidente Clinton le otorgó la Medalla Presidencial de la Libertad. Y un poco antes de cumplir 100 años, en 2002, Murie recibió el premio JN Ding Darling Conservationist of the Year Award, el más alto honor de la Federación Nacional de Vida Silvestre . 

Un año después, murió en Moose, Wyoming, a la edad de 101 años.