Haley Van Voorhis es una joven de 21 años que ha hecho historia en el fútbol americano universitario de Estados Unidos porque e pasado sábado 23 de septiembre, se convirtió en la primera mujer no pateadora que juega al menos unos minutos en un partido de la División III de la NCAA, la liga más importante del deporte estudiantil. 

Y este hecho es importante porque hasta ahora las mujeres eran pateadoras, es decir salían al campo para chutar el balón mientras que todo el equipo las defendía de los contrarios. Pero Haley ha saltado a jugar sin que sus compañeros le cubran la espalda.

Van Voorhis juega de safety para la Universidad Shenandoah, un pequeño centro educativo ubicado en Winchester, Virginia. En el partido contra Juniata College, entró en el primer cuarto y logró presionar al quarterback rival en una tercera oportunidad, forzando el despeje del equipo contrario. 

Su gran participación fue celebrada por sus compañeros, entrenadores y aficionados, que reconocieron su valentía y talento para practicar un deporte dominado por los hombres y en una posición donde compite de igual a igual. 

La joven nació en Plains, Virginia, y desde pequeña mostró su pasión por el fútbol americano. Jugó en la escuela secundaria de Christchurch y recibió la Mención de Honor de todo el estado en 2019. Su temporada senior fue cancelada debido a la pandemia de Covid-19, pero eso no le impidió seguir su sueño de jugar a nivel universitario. 

Van Voorhis no es la primera mujer en el fútbol americano y le han precedido Katie Hnida, la primera mujer en anotar en un partido de la División I-A de la NCAA como pateadora en Nuevo México en 2003, o Sarah Fuller, la primera mujer en anotar en un partido de la Power 5 Conference como pateadora en Vanderbilt en 2020. 

Pero insistimos, ella ha sido la primera mujer que ha logrado jugar en una posición diferente al pateador enfrentándose  a jugadores más grandes y fuertes que ella, y soportar los golpes y las caídas propias del juego. 

Van Voorhis no se dejó intimidar por las críticas o los prejuicios que recibió por jugar con los hombres. En una entrevista con ESPN en 2021, dijo: 

"Definitivamente hay gente que ve la historia y piensa: 'Esta chica va a salir lastimada'. Escucho eso mucho. O, 'Ella es demasiado pequeña, no pesa lo suficiente, no es lo suficientemente alta'. Pero no soy el más bajo de mi equipo ni el más liviano". 

Van Voorhis ha hecho historia en el fútbol americano universitario y ha abierto las puertas para que otras mujeres sigan sus pasos. Su ejemplo es una muestra de que el género no es una limitación para practicar el deporte que se ama.