Con tan solo 16 años Ciara Judge, junto a otras dos adolescentes tan brillantes como ella, Émer Hickey y Sophie Healy-Thow, propusieron usar una bacteria natural que aumentaría de forma espectacular el rendimiento de los cultivos de cereales para combatir el hambre en el mundo.
Ciara ya había ganado el premio al primer lugar en el Concurso de la Unión Europea para Jóvenes Científicos 2013. Y al año siguiente, junto con sus 2 amigas ganó el gran premio en Google Science Fair . Por todos sus logros a tan corta edad, Ciara también fue incluida como una de las 25 adolescentes más influyentes en Time para el año 2014 como resultado de su innovación.
La idea de Ciara y sus dos amigas para cambiar el mundo
Al momento de su descubrimiento científico, Judge era una estudiante de segundo año en Kinsale Community School en Kinsale. Su proyecto involucró una investigación estadística de los efectos de la bacteria Diazotroph en la germinación de las plantas. Evaluaron cómo las bacterias podrían usarse para combatir el hambre en el mundo, nada más ni nada menos.
Su proyecto tuvo como principal objetivo proporcionar una solución a los bajos rendimientos de los cultivos mediante el emparejamiento de una bacteria fijadora de nitrógeno en el suelo con cultivos de cereales. Después de meses de investigar, descubrieron que sus cultivos de prueba germinaron en la mitad del tiempo y tuvieron un rendimiento de masa seca hasta un 7 por ciento mayor de lo habitual.